martes, 9 de junio de 2015

Galeria de Imagenes del mono titi Cabeciblanco








El Mono Tití hace parte de tí


TITÍ CABECIBLANCO


CARACTERÍSTICAS

NOMBRE COMÚN: Mono tití cabeciblanco
NOMBRE CIENTÍFICO: Saguinus oedipus
REINO: Animal.
CLASE: Mamíferos.
FAMILIA: Callitrichidae.

El tití cabeza blanca, mono tití cabeciblanco, tamarino algodonoso, pinche, tití pielroja  o cabeza de algodón (Saguinus oedipus) es una especie de primate platirrino de la familia Callitrichidae, de hábitos diurnos y territoriales, que habitan al borde de los bosques o en las selvas secundarias al noroccidente de Colombia (Uraba cuenca baja de los ríos Atrato, Cauca y Magdalena).

¿DONDE LO ENCONTRAMOS?

Aunque el Mono tití cabeciblanco es abundante en cautividad con poblaciones tanto en zoológicos como instituciones de investigación por todo el mundo, este es uno de los primates con más peligro de extinción en su hábitat nativo de Colombia. Encontrado solamente en el norte-oeste de Colombia.
Los monos tití cabeciblancos son encontrados solamente en Colombia, desde la orilla Este del Río Atrato, la orilla Este del Río Cauca, y el bajo Magdalena limitado por la costa Norte del Caribe colombiano. Por el sur siguen los 1500 m contados desde el Este hacía el oeste empezando en el Río Cauca y cruzando la Serranía de Ayapel y la Serranía de San Jerónimo.




Organización social

Los pequeños grupos familiares tienen en promedio de 3 a 13 individuos, donde 2 a 6 son adultos de ambos sexos, y hay algunos juveniles que son descendientes. Generalmente hay mayor cantidad de machos que de Hembras que sean activas reproductivamente. Por lo que es normal observar que después de que la cría tiene 6 meses la madre desaparece seguida poco después por los machos originales del grupo. Se ha encontrado que pueden llegar a vivir 25 años.

DATOS CURIOSOS

  • Estos pequeños Primates habitan en grupos de 2 hasta 13 individuos (familiares).
  • El mono Tití defiende pequeñas áreas de acción o territorios de 8 hectáreas aproximadamente
  • Se levanta una hora después del amanecer, y como los otros titíes se retiran también antes del anochecer para evitar a los depredadores y aprovechar los rayos solares al máximo
  • Se desplaza entre 1 y dos kilómetros al día, cazando en procura de insectos, alimentándose de frutos y buscando sitios adecuados para descansar en las ramificaciones altas de árboles grandes
  • Tienen una gran variedad de sonidos que representan sus emociones y estados de animo.
  • En 1973, la especie fue declarada en peligro de extinción y la exportación fue cancelada. 
  • Son activos controladores de insectos y dispersores de semillas.



PRINCIPALES CAUSAS DE SU EXTINCIÓN



El mono tití cabeciblanco es tan colombiano, que si desapareciera del territorio, también lo haría del mundo, sobreviven entre árboles, defendiéndose a duras penas de la caza furtiva y la venta ilegal.
Antes de que eso sucediera habitaba en los bosques de Atlántico, Bolívar, Sucre, Córdoba y el norte del Urabá; pero en el último censo, hecho en el 2013, solo se registraron 7.000 ejemplares, un número que ha decrecido de manera constante desde el 2006.
Hace décadas los titíes cabeciblancos eran lo bastante numerosos como para subsistir sin problemas. Sin embargo, a finales de los años 60 y comienzos de los 70 se exportaron 30.000 titíes a Europa y a Estados Unidos, donde fueron utilizados en investigaciones biomédicas. Empezaron a ser muy comunes en los zoológicos de estos países, pero quienes lo veían desconocían que era un animal tan amenazado que solo se encuentra en el norte de Colombia.
En el país, el número de esta especie descendió hasta quedar aislados en pequeñas partes de bosques. Actualmente el panorama es devastador. La deforestación y el uso del suelo para la ganadería han destruido el 98 por ciento de su hábitat original. El índice de deforestación en Colombia sigue siendo uno de los más altos del mundo (120.933 hectáreas de bosque natural al año) y lo poco que queda de su hábitat se enfrenta a la contaminación.


Sumado a esto, los titíes siempre han sido capturados para el tráfico ilegal de especies, a menudo por habitantes de la zona que los usan para conseguir dinero.

¿QUE DEBEMOS HACER PARA REDUCIR EL RIESGO DE EXTINCIÓN?


Debemos crear una organización que se encargue de monitorear a diario los bosques, observando el comportamiento de este animalito, así como su localización y factores de migración. Rosamira Guillén, coordinadora del proyecto en Colombia, dice que "la solución es recuperar y conectar bosques; además se debe aumentar el espacio de hábitat porque con el tiempo irán perdiendo diversidad genética".
La presión urbana y la minería también afectan el hogar de esta especie; la única solución viable para mejorar esta situación es proteger y conectar los bosques existentes.
Las comunidades aledañas al bosque cazaban a la especie y talaban para conseguir leña, dejando el territorio desprovisto de árboles. Ahora el bosque les queda pequeño, incluso han iniciado conflictos territoriales entre la misma especie.
Los titíes cabeciblancos ya no tienen a dónde ir, no tienen dónde vivir. Debido a los terrenos usados para la ganadería, los árboles no pueden seguir creciendo y las fronteras de los bosques los dejan expuestos a los depredadores.
En un periodo de 10 años puede nacer un bosque en el que los animales pueden encontrar comida, pero no se quedarían a dormir porque necesitan de árboles más grandes que les provean refugio. Por lo menos 30 años tomaría tener un bosque en óptimas condiciones para el animal.